Tijuana, 24 de octubre de 2022.- En Baja California no existe un programa de manejo de residuos electrónicos como celulares, computadoras, televisiones o artículos de sonido en desuso; a estos se les puede sumar chatarra como refrigeradores, lavadoras, licuadoras entre otros. En el caso de electrónicos, hay una ambigüedad para determinar qué autoridad debe hacerse cargo de su manejo porque, aunque de manera interna, México no reconoce su peligrosidad, sí contienen componentes que, de acuerdo a la NOM52, los cataloga como residuos peligrosos.
Los residuos en la legislación mexicana están clasificados en Residuos Sólidos Urbanos (RSU) de competencia municipal, Residuos de Manejo Especial (RME) a cargo del estado y Residuos Peligrosos (RP) de jurisdicción federal. Los residuos electrónicos se consideran de Manejo Especial, mientras en convenios internacionales que México firma y avala como ley se catalogan como peligrosos. Esta confusión lleva a una irresponsabilidad institucional para atender su manejo mientras terminan mezclados con la basura urbana o en espacios públicos sin regulación.
José Carmelo Zavala Álvarez, director del Centro de Innovación y Gestión Ambiental (CIGA) destacó la generación de basura electrónica en recientes años de la que, se desconoce su paradero, tal es el caso de las más de 10 millones de televisiones que dejaron de utilizarse con el “Apagón Analógico” al recibir de autoridades federales una pantalla plana. Estas televisiones viejas que jamás fueron recuperadas tienen las características de los residuos peligrosos, metales pesados y compuestos tóxicos al hacer combustión.