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La noche de los Nahuales|| Por Benjamín M. Ramírez

EN RETROACTIVO, UNA MIRADA RETROSPECTIVA PARA EL 2024|| Si bien es cierto que aún quedan muchos pendientes en materia de seguridad, salud, justicia, educación y desarrollo económico, también lo es el hecho de que no se cumplieron los pronósticos que los agoreros del desastre habían vaticinado para la administración que ya inició sus estertóreos de final de sexenio.

by Benjamín M Ramírez

EN RETROACTIVO, UNA MIRADA RETROSPECTIVA PARA EL 2024

 

LA NOCHE DE LOS NAHUALES

Benjamín M. Ramírez

 

Cronos, el padre tiempo, se mostrará inexorable en el 2024. Para comprenderlo y enfrentarlo de la mejor manera será necesaria una revisión de lo que ha acontecido, que desde el punto de vista de su utilidad, de las emociones o teorías críticas, ni caso tiene. El pasado ya no es. Ni siquiera Dios, en su omnipotencia puede realizar que no sea, destruirlo, negarlo o desaparecerlo, a menos que quiera caer en la contradicción a su propia esencia.

 

Faltan pocos días, y la cuenta regresiva ya se puso andar desde antes del 1 de diciembre de 2019, cuando emocionados hasta la mucosidad, vimos el ascenso de un líder que defendió sus ideales a pesar de remar a contracorriente, de los obstáculos y “mañoserías” que se emplearon para intentar frenarlo. No lo consiguieron.

 

Si bien es cierto que aún quedan muchos pendientes en materia de seguridad, salud, justicia, educación y desarrollo económico, también lo es el hecho de que no se cumplieron los pronósticos que los agoreros del desastre habían vaticinado para la administración que ya inició sus estertóreos de final de sexenio.

 

Al fin de cuentas, es necesario presentar unos breves ejemplos para ratificar lo anteriormente expresado: el riesgo país pronosticado para México disminuyó, respecto a los índices que se tenían con relación al 2022, y se estabilizó para el 2023. Las perspectivas para el 2024 no son muy alentadoras porque se vaticina que la desaceleración económica de su principal socio comercial, Estados Unidos de Norteamérica, puede tener un impacto en las condiciones económicas de la Nación.

 

Otro de los aspectos que se debe considerar es el incremento significativo al salario mínimo durante la actual administración de Presidente Andrés Manuel López Obrador, ya que se pasó de los $88.36 pesos a 248.93 pesos, lo que contrasta con los raquíticos y vergonzosos aumentos no mayor a 2 pesos, en sexenios pasados. Tan es así, que para 2017, el aumento real del salario mínimo fue de 1.1%, para el 2018, de 102.68 pesos, lo que representa un ampliación salarial de 16.2% y de 100% respecto a los salarios de 2017.

 

Análisis realizado con IA presenta el siguiente resultado.

 

«1.- 2017: En diciembre de 2016, el gobierno mexicano anunció un aumento del 9.6% en el salario mínimo, llevándolo a $80.04 pesos diarios en la zona geográfica A (que incluye la Ciudad de México y algunas áreas cercanas) y $88.36 en la zona B.

 

«2.- 2018: En diciembre de 2017, se anunció un aumento del 10.4%, alcanzando $88.36 en la zona A y $80.04 en la zona B.

 

«3.- 2019: En diciembre de 2018, el salario mínimo se incrementó en un 16.2%, llegando a $102.68 en la zona A y $176.72 en la zona B.

 

«4.- 2020: En diciembre de 2019, el salario mínimo aumentó en un 20%, alcanzando $123.22 en la zona A y $185.56 en la zona B.

 

«5.- 2021: En diciembre de 2020, el salario mínimo tuvo un aumento del 15%, llegando a $141.70 en la zona A y $213.39 en la zona B.

 

Balance en Comparación con Aumentos en 2000 y 2012:

 

«1.-  2000: A principios del año 2000, el salario mínimo en México era de aproximadamente $43.65. Durante esa década, los aumentos fueron modestos y no siempre lograron mantenerse al ritmo de la inflación y los costos de vida.

 

«2.- 2012: En 2012, el salario mínimo en México era de alrededor de $62.33. El aumento durante este período fue gradual, pero los incrementos no siempre pudieron compensar completamente la inflación y las crecientes necesidades de los trabajadores.

 

Comparando estos periodos, se observa que los incrementos en los últimos años (2018-2020) fueron más sustanciales en términos porcentuales en comparación con los aumentos anteriores.

 

Es necesario destacar que: “La figura del salario mínimo se establece con la promulgación de la Constitución General de la República publicada en el DOF del 5 de febrero de 1917, específicamente en el artículo 123, fracción VI bajo el principio de que el salario mínimo deberá ser suficiente “…para satisfacer las necesidades normales de la vida del obrero, su educación y sus placeres honestos, considerándolo como jefe de familia…”. Se determina, asimismo, en la fracción VIII, que el salario mínimo no podrá ser objeto de embargo, compensación o descuento alguno”.

 

Puedo estar seguro que no se han alcanzado aún las metas “hacia el cumplimiento del mandato constitucional: “El salario mínimo debe ser suficiente para satisfacer las necesidades normales de un jefe de familia, en el orden material, social y cultural, y para proveer a la educación obligatoria de los hijos”. Considero que con e incremento de 20% para este 2024 se presenta la recuperación de la dignidad salarial, y que los efectos de la inflación no reflejan los argumentos expresados en administraciones pasadas de que un aumento considerable al salario mínimo pondría en bancarrota al país.

 

Desde esta perspectiva, también es necesario que la brutalidad con la que golpea la delincuencia común y organizada a la sociedad se haya incrementado durante la presente administración, y quizá será la deuda que el actual mandatario no saldará, no podrá saldar, en estos estertores de su sexenio. Es un grito de desesperación, de plegaria, de ruego insoslayable que ninguno de los tres poderes ha querido escuchar y atender el reclamo de la ciudadanía. Las cifras son de por sí, y en sí mismas, alarmantes. Quienes deben estar tras las rejas son los que infringen la ley y no la población. Es el que delinque el que debe tener miedo y no el ciudadano.

 

ARGENTINA

 

Tremendo revés se han llevado los argentinos con las acciones políticas, económicas, administrativas y civiles que ha implementado el recién electo Presidente de la República: Milei ha sacrificado a los jubilados y pensionados a partir del decreto en el que se determina cuánto ganarán dependiendo de la voluntad presidencial. Milei también ha penalizado la protesta, no se deberán reunir más de dos personas, no podrán bloquear las calles, entre otras estrategias que restringen el derecho a la manifestación libre de las ideas.

 

Dolió el corazón cuando escuche a un argentino expresar “[…] me tengo que sacrificar yo para que mis hijos no sufran”.

 

En Argentina el dólar se ha disparado al tipo de cambio de 800 pesos argentinos por dólar. Un testimonio de un “laburante” da cuenta de que debía por su casa alrededor de 2 millones de pesos, y con las medidas implementadas desde la Casa Rosada su deuda se disparó a más de 40 millones.

 

Este país debe abrigar más que esperanzas, más que oraciones, porque han sido defraudados… Milei aseguró durante su campaña: “Prefiero cortarme un brazo antes que subir los impuestos”. No cumplió.

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