Fernando Chagoyán Kaplun
Tijuana a 10 de julio de 2022.- Una bocina y su habilidad para realizar piruetas es lo que le ha permitido a Goek y su compañero hayan sobrevivido la pandemia.
En el cruce fronterizo de Otay, quienes buscan ingresar a Estados Unidos se topan con una pareja muy singular justo antes de ingresar a las puertas de acceso.
Son Goek y su colega, quienes con sus giros y acrobacias sacan una que otra moneda para sobrevivir.
“A raíz de la pandemia, carnal. Nos quedamos sin chamba y decidimos salir a hacer street shows. Yo era instructor físico y mi camarada se dedicaba a la refrigeración en una fábrica, pero no nos quedó de otra que salir a las calles”, dijo Goek, bailarín callejero.
La mezcla de ritmos y sonidos son únicos y particulares, pues se considera que para bailar brake dance, se utiliza el género rap, sin embargo Goek y su colega prefieren la salsa e incluso cumbia para mezclar el baile callejero y sus ritmos caribeños.
“Es que baile es baile carnal y a la gente le gusta, la neta sí nos apoyan. Nos alivianan y con eso sacamos adelante a nuestras familias y a cambio, les hacemos pasar un buen rato mientras hacen fila para ingresar a Estados Unidos”, comentó Goek.
En Otay, al final de la línea para cruzar a Estados Unidos, un par de bailarines callejeros mezclan los pasos de brake dance y la salsa para hacer único su estilo y marcar una diferencia que entretenga a los visitantes que dejan México.
